Texto y fotos: Hugo Rodríguez.

Recientemente MINOLTA nos ha sorprendido muy gratamente con la presentación de su nuevo buque insignia, la Dynax 9, modelo que viene a sustituir a la Dynax 9xi. Muchos cambios y muy profundos han sido efectuados no sólo en las prestaciones, sino en la filosofía de la cámara en sí. Una de las pocas cosas que no han cambiado es la velocidad mas rápida del obturador, el más rápido del mundo, que ahora nos ofrece por primera vez en una reflex, la velocidad de sincronización real, y con cualquier flash del mercado (que se pueda acoplar a su zapata), de 1/300 de segundo.

Una cámara profesional de nuevo concepto

Si pusiéramos una Dynax 9xi al lado de una Dynax 9, veríamos que poco se parecen, salvo en ciertos detalles, como que las dos lucen la palabra MINOLTA y son negras. La Dynax 9 es una cámara autofoco, multimodo, pero con cierto parecido en el aspecto externo a las manuales de toda la vida. En la Dynax 9xi, para acceder a la gran mayoría de sus funciones había que utilizar una secuencia de pulsaciones sobre alguno de sus botones seguido de giros de las ruedas sin fin, hasta dar con ella, para luego activarla o modificar algún parámetro. Desde entonces, mucho se nota que se han replanteado ciertas cosas los señores de Minolta, y así es según afirman en el folleto publicitario de este modelo. La característica mas llamativa, sin duda ninguna es la presencia de dos grandes mandos en la parte superior que nos permiten cambiar el modo de exposición y la compensación de exposición respectivamente. Todo comenzó con la Dynax 600si Classic, que si la comparamos con la Dynax 9, le encontramos un parecido "muy sospechoso", la podríamos llamar la Dynax 600si Professional.

El cuerpo

Tanto el esqueleto interno como el externo están realizados en zinc y acero respectivamente casi al 100 %. Nada mas cogerla en las manos se nota, no sólo por el peso sino también por el tacto frío del acero. El cuerpo está ergonómicamente muy depurado, se acopla a la mano como un guante. Casi todos los mandos están al alcance de algún dedo sin realizar grandes esfuerzos. Y los que no lo están o requieren una comprobación visual no son los mas utilizados. Así, encontramos a la derecha del pentaprisma el mando de modo de exposición, que lleva un anillo concéntrico con los modos de avance de la película, de bracketing (para luz ambiente y flash), autodisparador y multiexposición. Este anillo es, en mi humilde opinión, uno de los mayores acierto de diseño pues nos ofrece en un solo dispositivo manejable con el dedo índice de la mano derecha rápidamente y casi sin mirar todas las funciones comentadas.

A su derecha (detrás del botón de disparo) está la pequeña pantalla digital que nos muestra la velocidad seleccionada, el diafragma, el nivel de carga de la pila y poco más ya que toda la información que no incluye ya está a la vista en los diferentes mandos "manuales".

A la izquierda del pentaprisma con (flash retráctil incorporado) encontramos un solo disco con varias funciones -una de ellas semiescondida- a saber: compensación de la exposición de luz ambiente y de flash. Como en el otro disco comentado más arriba también lleva un anillo concéntrico que nos permite compensar la exposición del flash. La función "oculta" es nada mas y nada menos que el cambio de los pasos de ajuste en EV de 1 / 2 a 1 / 3. El cambio se hace tirando hacia arriba del mando principal y girándolo 180º hasta que vuelve a encajar. Este mando lleva además una pequeña palanca que bloquea el mismo, previniendo contra ajustes involuntarios. Y por si fuera poco en la oscuridad se puede comprobar el modo de exposición y de compensación de luz ambiente gracias a que las letras están realizadas con fósforo, el mismo material que llevan las agujas de los relojes. La pantalla digital, también lleva su propia iluminación EL (Electroluminiscente) para poder verla en total oscuridad.

A los mandos

Pasemos al dorso. Empezando por arriba, tenemos a un lado el interruptor principal –marcado como "ON-LOCK"- y al otro encontramos varios controles. Una rueda sin fin se encarga de modificar la velocidad de obturación (entre 1/12000 y 30" además de la posición B) o la combinación velocidad-diafragma manteniendo la misma exposición, dependiendo claro está del modo en que nos encontremos. A su lado se encuentra el interruptor de iluminación de la pantalla LCD y a la izquierda de éste un doble mando. Pulsando sobre el botón "AEL" se bloquea la exposición (aparece un indicador en el visor) y como mandan los cánones, no se desbloquea hasta que pulsemos otra vez sobre él. En un selector giratorio concéntrico a este botón (que a decir verdad está un poco duro) se encuentran los modos de medición disponibles, que son el puntual (de circulo de 5,5mm de diámetro, o sea el 2,7% del total de la foto), el matricial (de 14 segmentos en panel de abeja) y el ponderado al centro (80% / 20%). Por último el botón "AF" nos permite cambiar el sensor del autofoco activo –por medio de la rueda sin fin delantera- de entre los 3 que dispone, o activar los 3 y dejar que sea la cámara la que decida cuál o cuales utilizar. También se nos muestra en el visor el sensor/es operativo/s iluminando/s sobre la propia pantalla de enfoque (en color amarillo y muy bien visible, por cierto) y por último, se bloquea tanto el autofoco como la exposición.

Ahora abrimos la tapa del respaldo trasero -también metálico- y nos encontramos un interior digno de admirar. Guías para la película, rodillos, contactos eléctricos, placa de presión de la película, todo está fabricado con una calidad y un acabado excelente y tiene además algo muy poco habitual: 2 filas de contactos para el código DX de los chasis de película (la segunda fila recoge información del nº de fotos del carrete y de la latitud de la película), lo que no sabemos es si utilizará esta información...

En la parte más baja del respaldo hay dos selectores. El primero –denominado "EYE START" nos permite activar – o desactivar- la función de encendido automático de los sistemas de la cámara por el ojo. Se trata de un sistema que se activa simplemente al acercar el ojo al visor, debido a que justo debajo del ocular del visor hay un emisor y un receptor de rayos infrarrojos; así al acercar la cámara al ojo y rebotar este rayo en nuestro ojo, el receptor lo detecta y la cámara se enciende. Eso sí, siempre y cuando tengamos la cámara en mano, ya que sino no se enciende, porque tiene un sensor en la empuñadura (unas franjas metálicas) que detecta si la tenemos cogida en mano. Lo mejor de este sistema es que nos evita el estar pendientes de ir activando el autofoco, porque ya estará activado y podemos concentrarnos en la exposición o en la composición, mientras el "EYE START" se encarga de mantener autofoco. El segundo selector se refiere al flash y tiene cuatro posiciones: normal, sincronización a la cortinilla trasera, reducción de ojos rojos (dispara 3 destellos de baja potencia antes del disparo definitivo) y la posición "WIRELESS" (sin cable). Este último modo permite disparar los flashes Minolta 3500xi o 5400xi/HS en TTL y sin cable, con un ratio de iluminación de 2/3 para el flash externo y 1/3 el incorporado.

Pasemos ahora a ver el frontal de la Dynax 9. Junto al botón disparador está la segunda rueda sin fin, con la que se puede variar la apertura del diafragma y en caso de que deseemos la compensación de la exposición de la luz ambiente mediante una función personalizada. Justo al lado hay una ventanilla tras la cual se oculta el iluminador de AF (comúnmente mal llamado infrarrojo). Otro mando es el de comprobación visual de la profundidad de campo, que pasa casi desapercibido, pero se encuentra al alcance del dedo meñique derecho –pegado al objetivo- y es muy cómodamente accesible tanto en fotos con encuadre horizontal como en vertical cuando se utiliza la empuñadura opcional. El único inconveniente (no iba a ser todo perfecto) es que hace mas ruido que al hacer una foto, con lo cual nos puede "delatar" sin haber hecho todavía la foto...

Control de flash avanzado

La Dynax 9 tiene un flash incorporado retráctil con cobertura para un objetivo de 24mm y número guía anunciado 12 (una vez comprobado vemos que el nº guía real es 10,2).

El sistema de medición TTL del destello de flash está a la altura del conjunto. Utiliza un sensor de 4 segmentos que junto a la electrónica de la cámara determina dónde es posible que se encuentre el sujeto o punto de interés para concentrar allí toda su atención. Cuando está montado sobre la exclusiva zapata el 5400HS, dispara antes de la apertura del obturador pero después del disparo, un destello previo para que la cámara obtenga más información sobre la escena utilizando el sensor de la medición matricial (de 14 segmentos en panel de abeja). Con este mismo flash, la Dynax 9 puede disparar a una velocidad superior a 1/300, llegando hasta la escalofriante velocidad sincro de 1/12000 de segundo, eso sí, a costa de perder nº guía. Para completar, dispone de conector estándar tipo PC para flashes de estudio.

Autofoco

La Dynax 9 está dotada de 3 grandes sensores, prácticamente en la misma colocación que en anteriores cámaras Minolta, esto es un sensor central y dos verticales a los flancos de gran área. Podemos seleccionar desde el botón "AF" cuál de los tres utilizar o dejar que la Dynax9 lo haga por nosotros. El sistema de enfoque funciona con suavidad, como es habitual en las Minolta, y gran velocidad. Posiblemente no es la más rápida del mercado pero sí que es muy, pero que muy rápida. En el frontal de la cámara se encuentran –junto al objetivo, a su derecha si se mira de frente- el selector de cambio entre enfoque manual y AF y un selector giratorio –difícil de accionar, por cierto- para el cambio entre autofoco de seguimiento –para sujetos móviles-, sencillo y automático – para sujetos que se mueven y paran repentinamente-.

El visor, es de punto de mira elevado, del 100% de cobertura, cuenta con toda la información necesaria (excepto tal vez el modo de exposición y medición), tiene corrector de dioptrías incorporado y cierre de ocular. Además es muy luminoso y tiene un muy buen contraste.

Otros refinamientos

Minolta la ha dotado de funciones personalizadas, accesibles bajo una tapa, en un lateral. Bajo esta tapa, se encuentra otra mucho mas pequeña que protege el conector del cable disparador eléctrico. Las funciones personalizables –que llegan a las 21- han sido cuidadosamente estudiadas y no son las habituales; ofrecen un grado de personalización posiblemente mas elevado que cualquier otra cámara del mercado Por último, la Dynax 9 esconde algo realmente útil y de una manera muy depurada: la memorización de datos de hasta 7 carretes de 36 fotos. Los datos memorizados son: velocidad de obturación, diafragma, distancia focal, compensación de la exposición de luz ambiente y de flash, modo de exposición y modo de medición. Lo mejor del asunto es que para que empiece a guardar datos, y para verlos no hace falta una conexión al ordenador personal –vía accesorio opcional con cable y software- sino que sin tener que adquirir nada se pueden leer en la misma cámara los datos memorizados. Pero lo mejor de todo es que existe la posibilidad de, comprando el respaldo DM-9, ampliar tanto el número de carretes guardados como los datos almacenados hasta 400 y 18 respectivamente. Con este mismo respaldo, que no aparenta externamente ni por asomo toda la tecnología punta que lleva dentro, se puede además guardar todos los datos en tarjetas SmartMedia de 2Mb, y comprobar dichos datos en su pantalla, mas adecuada y cómoda que la de la cámara para este fin, o en un ordenador personal, pues también se puede conectar a uno. Además puede imprimir algunos de los datos en la película, pero no dentro del fotograma, sino entre 2 contiguos, como debe de ser y por supuesto está realizado con el mismo metal y aspecto externo que la cámara, para que no desentone.

La completísima empuñadura vertical VC-9, fabricada por supuesto de zinc y acero, tiene botón de disparo, ruedas sin fin delantera y trasera, botón de AF y botón de bloqueo de AF. Acepta además cuatro tipos de pilas, pudiendo llevar dos de litio –CR123A- simultáneamente con otras y en cualquier momento podemos conmutar de una a otra con un selector al efecto. ¿Que se nos acaba un juego o que hace mucho frío y las alcalinas se han quedado tiesas?, pues nada, se conmuta a la de Litio y problema resuelto.

Además de todo lo comentado, la Minolta Dynax 9 ofrece todavía mas: pantallas de enfoque intercambiables, cierre de espejo por medio del autodisparador, otro respaldo fechador, protección contra el polvo y lluvia, disparadores por radio, y suficientes objetivos para satisfacer al aficionado o profesional. Desde el AF 16mm Fisheye hasta el AF 600mm f:4 Apo-G hay un buen número de ópticas encabezadas por los extraordinarios objetivos de la serie G. Para la prueba hemos utilizado el AF 28-70 f:2,8 G, uno de los mejores zooms 28-70 de la actualidad, sin ningún lugar a dudas; el rendimiento óptico a f:8 en 28 y a 40mm es extraordinario y ya a 28mm y a diafragma abierto muestra una definición y un contraste muy elevados.

Conclusión

La verdad, es que la Minolta Dynax 9 tiene tantas prestaciones que llega a abrumar. Esta vez no hay casi nada que achacarle ni echar de menos. Lo tiene todo. Es una cámara que exige un detenido estudio de su manual para sacarle el máximo jugo, pero a cambio ofrece lo último de lo último.