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Comprimir y descomprimir con WinRAR.

Comprimir y descomprimir archivos es algo tan común que conocer cómo se hace con rapidez y cuándo conviene (y cuándo no) es imprescindible. Aunque este apartado no está claramente dentro de la temática de este tutorial, lo he incluido por la importancia que tiene y por otros aspectos:

1- Curiosamente, el Winzip es el programa más utilizado con diferencia, pero no el más eficiente, ni el que tiene mayores posibilidades. Ni siquiera es capaz de comprimir tanto como otros. Y además, sólo trabaja con ficheros ZIP.
2- He visto muchas veces como la gente comprime mal: comprimen fotos ya comprimidas (JPG, AVI,..) o comprimen archivos ya comprimidos dos o más veces.
3- Comprimir y enviar por e-mail es, en muchas ocasiones, una tortura por los múltiples problemas que se presentan: limitaciones en el buzón de destino, en nuestro propio servidor...
4- ¿sabías que comprimir y encriptar es la mejor forma de dar TOTAL seguridad a uno/s archivo/s?. Si tienes documentos que quieres blindar, comprimirlos y encriptarlos es infalible. No lo dudes, pues, protege tus documentos privados, ye impedirás su acceso incluso para aquél que sea capaz de saltarse la seguridad de Windows.

Existen muchos programas para comprimir, pero yo recomiendo el WinRAR. Se encuentra en español, es barato, FÁCIL de usar, con muchas opciones, y comprime mucho. Por eso lo recomiendo. Hay quien prefiere el WinACE, por su capacidad para comprimir algo más, pero la "farragosidad" del interfaz del programa (lleno de botones y menus por todas partes) le quita, en mi humilde opinión, usabilidad. El WinRAR, en cambio, es sencillo y tiene cierto parecido a la interfaz del WinZIP, que también es muy facil de usar.
Una vez instalado (y es increíblemente facil de instalar), abrimos el programa desde el menú inicio y encontraremos algo así:
NOTA: He usado la versión 3.0 en castellano para las capturas.

En primer lugar reducimos el tamaño de los botones, que es excesivo. Eso se hace con un clic derecho sobre la zona de los botones, y desactivando la opción de Botones grandes:

Ahora, como en cualquier otro programa en que aparezca una lista de archivos por columnas, conviene ajustar el ancho de las mismas, de manera similar a como hicimos con el explorador de windows, para que se lean con comodidad:

y luego configuramos algunas opciones básicas. Para ello, entramos en las opciones de configuración con Ctrl + S y vamos a la pestaña Configuración para Crear un perfil predeterminado de compresión. Esto agiliza bastante la tarea de comprimir, porque no hay que decirle a WinRAR cada vez como lo tiene que hacer, porque ya lo sabrá:

Una vez dentro, elegimos la cantidad de compresión por defecto. Ajustarla al máximo es una buena opción.

pero no debe olvidarse un detalle que puede ser de agradecer en ciertas ocasiones:

Activando esta casilla, WinRAR añade una pequeña información al archivo que puede ayudar a recuperarlo el dia que se daña. Esto es habitual al grabarlos en disquetes o CD. El dia que fallan (sea por rayones, exposición directa al sol, golpes o lo que sea) su información puede quedar irrecuperable. Con un registro de recuperación puede recuperarse la información, siempre y cuando haya algo de espacio libre en el disco. En el caso de disquetes (si es que todavía los usas), hay que tenerlo en cuenta para que el archivo comprimido no ocupe todo el disquete. Acepta y cierra las opciones.

Ahora vemos cómo comprimir un archivo. Digo archivo por decir algo pero, en realidad, se puede aplicar a una serie de archivos, una carpeta o varias. Vamos, a lo que se quiera. Nos situamos en el explorador de windows, seleccionamos aquellos archivos que queramos, hacemos clic derecho y seleccionamos una de las cuatro opciones disponibles:

Si prefieres que las opciones de WinRAR no aparezcan en un desplegable, sino en el mismo menú:

tienes que entrar de nuevo en las opciones y desactivar lo siguiente:

Eligiendo la primera opción, Añadir al archivo..., la que permite más control, sale esta ventana, donde se pueden elegir los ajustes para esta ocasión:

Como se puede ver, permanecen tal como los dejamos ajustados. Al comprimir archivos muy grandes o hacer backups y suponiendo que tienes dos discos duros, es muy útil pulsar en Examinar... para decirle a WinRAR que cree el comprimido en el otro disco duro. También es muy útil la opción de Crear un archivo SFX. Aunque suena un poco espacial la cosa, no es más que crear un SelF-eXecutable, es decir, un autoejecutable o autodescomprimible. Supon que le envias unos archivos comprimidos a un amigo que no tiene Winzip, ni WinRAR ni na de ná. Pues le envias un autodescomprimible para que cuando él haga doble clic sobre el archivo, simplemente se le pida dónde poner el contenido, sin necesidad de tener nada más.

Si quisiéras encriptar (proteger) este archivo comprimido con una contraseña, ve a la pestaña Avanzado. Allí, puedes activar la casilla:

para que se guarden las opciones de seguridad NTFS que ya vimos. Pero lo más importante es la contraseña. Pulsa en Establezca la contraseña... y verás esto:

donde puedes ponérsela. Si activas Codificar nombres de ficheros, no sólo no se podrán descomprimir los archivos, sino que ni siquiera se puede ver qué archivos hay.

Consejos para usar convenientemente los comprimidos:

1- No comprimas archivos de imagenes ya comprimidos, tales como JPG, PNG, GIF, porque no sirve de nada. Lo único que conseguirás es perder tiempo viendo como el resultado ocupa lo mismo que el original. La explicación es muy sencilla: estas imágenes ya están fuertemente comprimidas, tanto que utilizan una compresión CON pérdida de información, es decir que se comprimen tanto que pierden detalle. ¿Como va a reducirlas el WinRAR (o cualquiera de sus homologos) si utilizan SIEMPRE técnicas de compresión SIN pérdida?.
Lo mismo se aplica a archivos de sonido (MP3, etc.) y vídeo (MPG, QT, AVI).
2- Cuando hagas backups de tus imágenes y quieras protegerlas, hazlo con WinRAR, pero eligiendo "Almacenar", que es la compresión cero. Esta operación será muy rápida y protege de la misma forma el contenido.
3- Comprime SIEMPRE que envies por email. Los documentos de Word, Excel, Corel Draw, Freehand, AutoCAD, 3ds Max, Flash (los .fla, no los .swf) y muchos otros que contengan texto o dibujos se pueden comprimir bastante, por norma general. En el caso de enviar imágenes TIFF u otras con compresión LZW o sin comprimir, sí que se debe comprimir, porque el WinRAR será capaz de reducirlas un poco.
4- Recuerda que para enviar por email a gente que use Yahoo!, Hotmail y demás, no suelen admitir emails de más de 1024 KB. Como al enviar adjuntos, el tamaño final que se envía suele ser mayor de lo que parece, parte los archivos en trozos de menos de 1024 KB (unos 900 KB, por ejemplo). Como siempre en estos casos, conviene hacer pruebas.
5- No comprimas dos veces los archivos. No tiene sentido hacerlo porque, aparte de perder tiempo, cada vez ocupa más.
6- Tampoco comprimas los instaladores de programas, porque ya vienen comprimidos. Si quieres guardarlos en CD, dejalos así, porque ya están al mínimo. Yo, de hecho, los descomprimo para ahorrar tiempo al instalarlos, porque no hay que esperar a que se descompriman en una carpeta temporal que, por cierto, muchos no borran al terminar y no hace más que ocupar espacio en C:

 

 
 
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